Scotiabank: familias cierran año menos endeudadas, pero inversión podría frenarse 30 días antes de elecciones

El CEO de Scotiabank Perú, Sebastian Arcuri, proyecta un cierre de 2025 con resultados históricos y familias con menor endeudamiento, impulsadas por retiros de AFP y términos de intercambio favorables. Sin embargo, alerta que la incertidumbre electoral podría golpear la inversión privada en marzo 2026, cuando el 50% de peruanos decide su voto. Te contamos qué pilares sostienen el optimismo del banco y dónde están los riesgos.

Scotiabank cierra 2025 con récords históricos

• Crecimiento de utilidades netas: 104% hasta septiembre 2025 (vs. mismo periodo 2024).
• Proyección: Cierre con resultados históricos año contra año.
• Retorno sobre equity: "Muy positivo", según contabilidad canadiense del grupo.
• Apuesta sectorial: Minería (grandes proyectos de cobre), agroindustria (Perú formador de precios internacionales), energía (transmisión/generación), infraestructura (mayor ticket en financiamiento del Aeropuerto Jorge Chávez), y real estate de vivienda.

El estado de empresas y familias al cierre de año

Empresas: inversión sorprendentemente firme

• Inversión privada: "Nos sigue sorprendiendo positivamente", señala Arcuri. A diferencia de ciclos electorales anteriores, no se observa desaceleración en proyectos de inversión a 4 meses de las elecciones.
• Sectores estrella: Minería, agroindustria, real estate vivienda y energía reportan buenos resultados.
• Permisos en ejecución: Grandes proyectos ya autorizados generan "viento de cola" para el primer trimestre 2026.

Familias: menos deudas, más consumo

• Endeudamiento en descenso: Las familias cierran 2025 con menor carga de deuda que en años anteriores.
• Consumo al alza: Retiros de AFP impulsan demanda interna, especialmente en compras navideñas de diciembre.
• Poder adquisitivo: Sol fuerte y baja inflación sostienen capacidad de gasto.

Por qué este escenario importa

• Desacople economía-política: La economía crece en un "carril separado" de la incertidumbre política. Arcuri identifica el fenómeno del "FOMO" (fear of missing out): empresarios no quieren quedarse fuera del momento positivo, a pesar de riesgos electorales.
• Cambio de tendencia histórica: Tradicionalmente, la inversión privada se desacelera en año electoral. Que esto no ocurra ahora es inusual y puede reflejar: (a) confianza en la institucionalidad económica, (b) retornos de proyectos en curso demasiado altos para frenarlos, o (c) subestimación del riesgo político.
• Familias con margen: Menor endeudamiento + retiros AFP = colchón para shocks. Esto contrasta con datos de gratificaciones (66% dice que no alcanza), sugiriendo dos realidades: clientes bancarizados mejoran, pero el grueso de trabajadores aún presionado.

El punto de quiebre: 30 días antes de la primera vuelta

Arcuri es contundente: "30 días antes de las elecciones va a ser el primer shock, el primer despertar a esa realidad electoral".

Los números de la incertidumbre:

• 42% de indecisos (a diciembre 2024).
• 50% de la población decide su voto en los últimos 30 días.
• 36-40 propuestas presidenciales, sin norte político consolidado según politólogos.
• Precedente 2021: El ganador no figuraba en encuestas finales divulgables.

¿Qué puede pasar a partir de marzo 2026?

• Escenario optimista: Si gana un candidato de centro/centro-derecha (8 de los primeros en encuestas), la inversión se consolida y la economía sigue creciendo.
• Escenario de desaceleración: Si emerge un candidato disruptivo o anti-mercado, proyectos pueden frenarse abruptamente.
• Scotiabank no tiene escenario base: "Tienes que ser mago más que politólogo para determinarlo", admite Arcuri.

Señales a vigilar en los próximos meses

• Inversión privada en Q1 2026: ¿Se mantiene la inercia positiva o aparecen señales de cautela (postergación de licitaciones, menor demanda de crédito corporativo)?
• Encuestas marzo 2026: ¿Quién lidera? Si un candidato fuera del establishment sube rápido, esperar movimientos defensivos (dolarización de portafolios, retraso de decisiones).
• Flujos de capital: ¿Aumentan salidas de inversión extranjera o se mantienen? El tipo de cambio puede ser termómetro.
• Consumo de familias: ¿El impulso de retiros AFP se agota en Q1 o se sostiene? Eso determinará si el comercio y servicios mantienen dinamismo.
• Crédito hipotecario y automotriz: Decisiones de largo plazo (casa, auto) son las primeras en frenarse ante incertidumbre. Ver evolución en febrero-marzo.

¿Qué puede cambiar para empresas y familias?

• Empresas: Ventana de oportunidad hasta marzo. Proyectos con ROI claro y cronogramas cortos deberían ejecutarse ahora. Los de largo plazo (>2 años) enfrentan riesgo de parálisis post-electoral.
• Familias: Aprovechar bajo endeudamiento y liquidez (AFP) para crear colchón de emergencia, no solo consumir. Si la economía se desacelera post-elecciones, empleo e ingresos pueden resentirse.
• Sector financiero: Scotiabank invierte fuerte en IA (licencias de Copilot para cada colaborador, automatización de reclamos y evaluación de seguros) para ganar eficiencia. Otros bancos deberían seguir la ruta o perderán competitividad.
• Inversores: Los "pilares" de Scotiabank (minería, agro, energía, infraestructura, vivienda) son refugio relativo, pero no inmunes. Diversificar y monitorear señales políticas es clave.

En reevalúa creemos que...

...el 2025 cierra con un desacople notable entre solidez económica e incertidumbre política. El "FOMO" empresarial y el bajo endeudamiento familiar son fortalezas, pero la historia electoral peruana enseña que el último mes antes de la primera vuelta puede cambiar todo. La pregunta no es si habrá volatilidad, sino cuánta. Quien tenga liquidez, flexibilidad y escenarios contingentes estará mejor posicionado para navegar marzo-abril 2026.

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